Conocer con detalle el número de cigarros que fuma una persona al día, permite desarrollar una estrategia para iniciar una intervención.
La mayoría de las personas no saben, con precisión, la cantidad de cigarros que fuman por día. Son muchas las razones por las cuales sucede esto. En principio no todos los días son iguales, hay quienes fuman más en los días laborales, mientras otros lo hacen más en los días de descanso. Durante una fiesta aumentan las probabilidades de fumar, ya sea por la compañía de amigos o familiares, que también fuman o por el ambiente de relajación que normalmente resulta más permisivo; estos son factores que influyen. En los lugares de trabajo existe la tendencia a fumar acompañados, ahí no falta quien ofrezca o pida un cigarro, lo cual da como resultado una pérdida en el control de la cantidad real de cigarros que se fuma. Las variaciones en actividad a lo largo del día, generan condiciones que favorecen o limitan la disponibilidad de lugares para fumar, por ello algunas personas fuman preferentemente en las mañanas, algunas por la tarde y otras al anochecer. El conocer cuántos cigarros se fuman por día, nos da una idea de la ingestión de nicotina, así como del costo, que nos permite conocer los cambios que debemos hacer para suprimirlo. Entonces, no es suficiente contar el número de cigarros faltantes en la cajetilla o el número de estas compradas a la semana. Una forma muy sencilla de saber cuánto se fuma es llevar una tarjeta de presentación pegada a la cajetilla, en cuyo reverso podemos anotar cada cigarro fumado. Incluso podemos presentar los resultados en una gráfica. Veamos un ejemplo.
Registro de fumador
Este modelo nos permite observar con mayor detalle la cantidad de cigarros fumados en una semana, de lunes a domingo. Bastarán un par de semanas para poder obtener un dato aceptable. El formato nos ofrece información interesante, en este ejemplo la persona tiende a fumar con mayor abundancia por las noches, especialmente los viernes. Habría que preguntarle, a nuestro voluntario, cuáles son las actividades que realiza al final del día que le llevan a fumar una mayor cantidad de cigarros. Conocer esta información permite diseñar las estrategias que resulten más favorables a fin de disminuir el consumo de cigarros. De esta manera se puede plantear una meta, basada en una reducción progresiva o fijarse un máximo de cigarros por día.
Gráfica de consumo
Registro grafico de tres semanas. En esta gráfica apreciamos una tendencia similar en el consumo diario de nuestro fumador. Con estos datos se puede hacer un estimado de lo que gasta en tabaco por mes y por año. En la mayoría de las estrategias para dejar de fumar se contabiliza el costo, como una medida adicional al daño del tabaquismo.